Y otra vez hablando de los cobradores de combi

Hace algunos post, publique algo sobre como

destrozaban algunos cobradores de combi la

Lengua Castellana

(ver: si cervantes los oyera) .

La verdad es que por extraño que parezca se pueden convertir

en tema para varios post, debido a que son elementos protagonistas

del caos. Existen eso si, cobradores que por su buen trato,

apariencia ordenada y educación merecen ser considerados la

excepcion a la regla, justamente la que hace más interesantes para estudio;

es más si se observa a los mencionados cobradores excepcionales,

en su mayoria se podria decir que pertenecen a la

¨vieja guardia¨de la profesion de cobrador, a aquellos pocos,

de la epoca en que lo importante, era el pasajero.

Ahora, nos pueden tocar tambien cobradores jóvenes

que hacen lo posible por respetar;

como uno cuyo comentario lei alguna vez en un blog

que defendiendo a su rubro,

decía que ellos podian gustar de la velocidad y el volumen alto,

pero que los pasajeros teniamos que respetarlos y

hablarles como a personas.

Eso es cierto, pero TODOS los cobradores tambien deberian respetar

a los pasajeros y hablar con un lenguaje respetuoso.

Refieriendome al grueso de población de este especimen:

A veces pienso que asi como Orwell o Verne, Tolkien tambien visualizo

algo del futuro que se avecinaba al mundo,

y cristalizo su visión catastrófica en sus más violentos, agresivos y

repulsivos personajes: orcos y uruk-hais.

El dia de hoy tuve la oportunidad de realizar observacion naturalista,

es decir solo mirar, pero mirar estudiando

a uno de estos especimenes.

Primero:

uñas largas (garras?), pelo mayormente grasiento,

ropa no siempre limpia,

se pelea a gritos con dateros, chofer, otros cobradores,

otros choferes, el carro que esta en otro carril, etc.

Grita, a veces hasta casi romperte el timpano (aun recuerdo

a uno que trabajaba en el que tomaba para ir de la universidad

a San Felipe, gritaba CHAMA tan alto, que se le saltaban las venas),

en lugar de permitirte subir, te empujan (¨apurese tengo que avanzar¨,

¨suba rápido, suba rapido¨ y lanza el ¨¡ya arranca!¨

cuando aun tienes un pie en el estribo y otro en el aire y estas

agarrandote como puedes de la baranda del carro.

Sabe contar rápido monedas, las organiza,

las hace sonar hasta a dos centimetros de la cara del pasajero

para recordar que hay que pagar.

Te pone mala cara si no tienes sencillo,

no le gusta que suban al carro escolares (gana poco) ni los

policias o bomberos con pase (no gana nada),

cobra 1 sol a todo pasajero que no vaya a distancia muy larga

y esta convencidisimo que la mitad de S/. 1,20 es S/. 1.00

xq eso es lo q segun él, vale el medio pasaje.

Ahora, que decir de su habilidad para organizar a los pasajeros?

una vez que estan ocupados todos los asientos del carro,

empieza a jugar Tetris con los que suben despues,

bajo la premisa de que si hay un centimetro libre

ahi cabe otro pasajero, y de que si se baja uno,

entran 2 y acomadas las rodillas, pones tu cartera, mochila

o lo que tengas sobre tus piernas y permites que el de al lado

te meta un codazo, pues entran 4 o 5,

llegando algunos a tener pasajeros que viajan en el estribo

mientras el demuestra muchisima pericia xq va con el cuerpo fuera del carro

agarrado de la puerta.

Y bueno, en la mayoria de los casos son los que deciden que música

se escucha en el carro (a todo volumen)..... y hay que ver que gustos tienen:

salsa dura, reggeton, perreo...... y demás. (Y tienen la cara de pegar stickers que

dicen cosas como ¨aqui todo el chevere: el carro, la musica y el chofer¨)

Por alli tenemos suerte (como a mi me toco) y milagrosamente te topas

con un fanatico ¡uno de los pocos! de Chopin, Mozart y Vivaldi

(con la complicidad del chofer)

o con un fanatico de Telestereo (idem)

pero normalmente, USB, DISCMAN o Celu con música,

son lo unico que te libra de la tortura sonora.

Bueno, he aqui mi concienzudo analisis psiclogico

de uno de los culpables de la CULTURA COMBI

una raza de seres relativamente nueva que

esta invadiendonos en alianza con

otro orco o uruk-hai con el merito de la velocidad (chofer)

armado con un vehiculo de 4 ruedas,

unos boletos y algunas monedas.